depósitos aduaneros

¿Qué son los depósitos aduaneros y cómo pueden influir en tu importación?

Los depósitos aduaneros, también conocidos como almacenes de aduanas, son lugares donde las mercancías que están viajando se almacenan de forma temporal con el objetivo de que los agentes de aduanas puedan controlarlas.

Debido a la etapa de la importación (o exportación) en la que se encuentran –aun no han llegado a su destino- los productos que se alojan en un depósito aduanero lo hacen sin pagar impuestos hasta que no son asignados a su destino final.

Hay diferentes tipos de depósitos aduaneros y, depende de la zona donde se encuentren, pueden ser almacenes cerrados (como los almacenes privados de cualquier empresa de logística) o zonas reservadas dentro de las propias aduanas; incluso espacios cercanos a las oficinas de las agencias tributarias que tengan que controlar la mercancía.

Depósitos aduaneros VS. Depósitos temporales

Las características de los depósitos aduaneros conducen a algunas empresas a usar este espacio como parte de su estrategia de logística. No obstante, es importante tener en cuenta que un depósito aduanero no es lo mismo que un depósito temporal.

Los almacenes de depósito temporal, también conocidos por sus siglas ADT, tienen como objetivo guardar la mercancía hasta que ésta tenga un destino otorgado. En ese sentido, cumplen una misma función que los depósitos aduaneros y, además, en ninguno de los casos, se permite la manipulación de los artículos.

A pesar de las similitudes, los ADT solo pueden usarse durante un tiempo total definido. Cuando se trata de mercancías que llegan por transporte marítimo, hay un límite de 45 días de estancia en el depósito temporal, un periodo que se recorta hasta los 20 días para otros tipos de transporte (aunque puede ampliarse con una prórroga de 90 días). En el caso de los depósitos aduaneros, no hay un tiempo límite para la mercancía, aunque en la mayoría de casos será la tipología de los productos lo que defina el tiempo máximo de estancia.

Tipos de depósitos aduaneros

La principal clasificación en los depósitos aduaneros parte de la distinción entre públicos y privados. No obstante, su tipología es bastante más compleja y cada uno de estos tipos de almacenes de aduanas alberga diferentes tipologías según de quién sea la responsabilidad.

Almacenes aduaneros de responsabilidad pública

Se podría definir como aquel espacio de almacenamiento que puede ser usado por cualquier usuario (cliente o depositante), que es precisamente el único autorizado a realizar la vinculación o desvinculación con el almacén.

  • Almacén Aduanero Tipo A: El propio almacén es el que tiene la responsabilidad.
  • Almacén Aduanero Tipo B: La responsabilidad es del cliente (depositante).
  • Almacén Aduanero Tipo F: Las autoridades aduaneras son las responsables.

Almacenes aduaneros de responsabilidad privada

Tal y como su nombre indica, estos almacenes pertenecen a una empresa privada y su uso está reservado a los clientes de su propia actividad.

  • Almacén Aduanero Tipo C: El almacén es propiedad del depositante.
  • Almacén Aduanero Tipo D: Al igual que el Tipo C, el depositante es el propietario del almacén, pero se realiza el procedimiento simplificado de domiciliación.
  • Almacén Aduanero Tipo E: Es un espacio asignado a un cliente para una operación concreta y la relación entre depositante y almacén expira en el momento en que ésta termina.

Ventajas de los almacenes de aduanas

Como decíamos anteriormente, son muchas las empresas que deciden almacenar sus productos en un depósito de aduanas como parte de su estrategia logística para aprovechar algunas de las ventajas más notables de esta tipología de almacenamiento.

  • Aplazamiento del pago de impuestos: No hay duda que uno de los principales beneficios de tener los productos de una importación en un almacén aduanero es la posibilidad de posponer el pago de aranceles e impuestos, ya que éstos no deberán abonarse hasta que la mercancía abandone este espacio.
  • Mejor eficiencia en el tiempo de entrega: Para muchas empresas, una alternativa a tener la mercancía en un depósito aduanero sería no haber comprado aun ese stock. El uso de este tipo de espacios permite tener existencias en un lugar controlado y facilita el tiempo de entrega y posterior logística del producto, así como evitar caer en problemas como la rotura de stock.
  • Gestión del stock de manera parcial: El depositante no está obligado a sacar todo su stock al mismo tiempo; puede hacerlo por lotes. Esta característica otorga una mayor flexibilidad a la hora de gestionar las mercancías.
  • Estancia ilimitada: Como hemos comentado anteriormente, en la mayoría de los casos los almacenes aduaneros ofrecen un tiempo de estancia ilimitado, lo que para muchas empresas es una gran tranquilidad.
  • Comprar a mejor precio: Esta tipología de almacén permite a algunas empresas apostar por hacer compras más grandes o aprovechar ciertas oscilaciones económicas (por ejemplo, cambio en el valor monetario) y, en ambos casos, beneficiarse de un mejor precio sin tener que liquidar impuestos hasta el momento de abandonar el almacén.

¿Necesita mi empresa usar un depósito aduanero?

En términos generales, podemos afirmar que los depósitos aduaneros son una buena opción para ahorrar costes en la importación, un hecho que acaba implicando un mayor beneficio comercial y, como consecuencia, mejora la ventaja competitiva de las empresas frente a su competencia.

A pesar de ello, cada empresa es diferente (incluso cuando hablamos de compañías de un mismo sector) y, por dicho motivo, tiene necesidades concretas que no siempre se solucionan del mismo modo.

En S3 Group, como profesionales de la importación, estamos especializados en estrategias de sourcing globales, que no solo mejoran el proceso de importación de las empresas, sino que tienen en cuenta todos los pasos a realizar para mejorar el proceso de compras y posterior logística. En este contexto, apostar por un depósito aduanero puede ser una buena opción, aunque no la única.