Tras un 2020 en que el sector textil ha sufrido notables pérdidas (sólo – parcialmente – mitigadas por la venta de mascarillas), son muchas las empresas de moda que se plantean cómo reducir gastos que les permitan obtener algo de estabilidad en sus negocios. En este contexto, la importación de productos de textil y/o moda desde China tiene un gran peso, ya que el bajo coste de producir en el país asiático ofrece mayores márgenes de beneficio.
Importar textil de China es una opción al alza que ya hace años que muchas empresas practican. Así, en 2018 en Reino Unido se importaron productos textiles de China por valor de 6,7 billones de dólares, situando al Gigante Asiático como el principal socio del país en este sector. Algo similar sucede en España, donde en 2019 también China fue el principal proveedor de productos textiles importados, con una inversión total de 6,29 billones de euros.
No obstante, hay que tener en cuenta una serie de factores a la hora de comprar textil en el Gigante Asiático, empezando por el tamaño de la empresa que desea hacer la importación. No nos referimos a un tamaño en cuanto a empleados, sino a analizar en profundidad cuáles son los canales de comercialización y distribución, diversidad del catálogo, rango de precios y nivel de ventas anuales.
Las características de nuestra empresa determinarán cuál es la inversión que queremos y podemos realizar y, por lo tanto, qué cantidad de productos textiles vamos a comprar. El volumen de la importación es muy importante, ya que además de determinar el precio de coste, puede condicionar a qué tipo de proveedores podemos acceder, teniendo en cuenta que muchos de ellos requieren un determinado pedido mínimo.
Otro factor determinante a tener en cuenta es la calidad de los productos. Aunque ha quedado más que demostrado que los productos chinos sí son de calidad, como en cualquier compra en cualquier país del mundo, las características y perfección de los mismos están directamente relacionadas con el precio de coste.
Una empresa de sourcing, clave para mejorar tu importación
En el momento en que una empresa se dispone a importar productos desde China para mejorar el precio de coste pero, al mismo tiempo, ese importe viene determinado por aspectos como la calidad o el volumen de compra, puede generarse un bucle que desincentive la importación.
La capacidad de negociación de una empresa pequeña o mediana está bastante limitada, algo que puede mejorarse contratando los servicios de una empresa de sourcing que, entre otras gestiones, negocia el precio de las piezas con el proveedor, al que normalmente ya conoce.
Es importante recordar que el valor de una compra se fundamenta en descubrir, comparar y negociar, algo para lo que no todas las empresas tienen experiencia suficiente. Además, los constantes cambios del mercado internacional hacen a menudo necesaria la figura del consultor de compras para gestionar las importaciones, especialmente en determinadas zonas geográficas como el continente asiático.
Más allá de seleccionar el mejor proveedor y negociar los precios, los servicios de una empresa de sourcing harán que la importación sea mucho más fácil y tenga un mayor porcentaje de éxito. Así, tareas como la permanente comunicación con el fabricante, los controles de calidad o la gestión de transporte y aduanas, que a menudo se convierten en problemas para el importador independiente, quedan bajo la supervisión y responsabilidad del equipo consultor de compras internacionales, que gracias a su amplia experiencia podrá hacer frente a cualquier imprevisto.
Tras más de 15 años trabajando en compras internacionales de China a diferentes países de Europa, en S3 Group podemos afirmar que importar productos textiles y de moda de China es una muy buena iniciativa cuando se hace de forma adecuada. Contar con la ayuda de un sourcing partner es, sin duda, la mejor manera de asegurar una importación exitosa que contribuya al crecimiento de competitividad de una empresa.